6 tips fundamentales para realizar el reciclaje de las pilas
Todos los días tiramos a la basura residuos que contienen sustancias nocivas al entrar en contacto con la tierra, el agua y afectamos la salud pública. Eso ocurre con las toneladas de pilas que se tiran a la basura, sin el respectivo proceso de reciclaje. Entonces, ¿qué hacer con las pilas usadas? Esta es una de las preguntas que se hacen la mayoría de las personas, pero lo que no saben es que, si no se reciclan, son dañinas para el medio ambiente.

- Las pilas se componen de elementos altamente tóxicos como mercurio, cadmio, aluminio, cinc, litio, niquel y manganeso. Aunque no todas son iguales, si se deben considerar como residuo peligroso.
- Para la fabricación de una sola pila se gasta 20 veces más energía de la que realmente está proporciona durante su vida útil, se puede decir que este soporte de energía es caro y poco eficiente, es más el daño que se le hace al planeta, que el uso efectivo de ellas.
- Cuando las pilas se botan con el resto de la basura, al paso del tiempo llegan a perder su revestimiento y se vierte su contenido, contaminando y causando un gran impacto en la naturaleza y en los seres vivos.
- Es importante llevar las pilas usadas a los centros de recolección de estos productos que se encuentran en centros comerciales o empresas. Aquí, los programas encargados las recogen y llevan a una planta de reciclaje, donde se separan los metales peligrosos del resto de materiales que constituyen la pila y puedan ser recuperados.
- Al desechar las pilas usadas, cubra los polos con cinta aislante o colóquela dentro de un recipiente plástico antes de depositarla en los contenedores especiales para ser recicladas, de esta manera se evitará el derrame de contaminantes.
Para intentar dar solución a esta problemática en Colombia la Asociación Nacional de Empresario de Colombiana (ANDI) creó una campaña para la recolección de pilas usadas, a través del programa “Pilas con el ambiente” el cual consiste en la recopilación de estas en los contenedores diseñados especialmente para su acopio que se encuentran en cerca de 10 ciudades del país.
De esta manera se puede contribuir desde el hogar, recolectando de manera organizada las pilas que se encuentran en desuso y asegurándose que sean apartadas y dejadas en estos lugares destinados donde dispongan de ellas de manera correcta para que no llegue a afectar el medio ambiente.
Ante este panorama y con el fin de evitar daños al ambiente, todos pueden empezar por cambiar sus hábitos y consumir de manera ambientalmente responsable: absteniéndose de usar pilas, no adquiera aparatos prescindibles exclusivamente con estas, busque otras tecnologías o innovaciones como la energía solar.
Por: Maria Camila Duarte – FMC